Embarazo psicológico

El embarazo psicológico es una manifestación de los síntomas del embarazo cuando aparece una mujer no embarazada en el útero de la mujer, el síntoma principal es la amenorrea y puede confirmarse mediante prueba de embarazo y ecografía abdominal o ecografía transvaginal.

El embarazo psicológico pseudoquistes afecta principalmente a mujeres que desean quedarse embarazadas o que tienen mucho miedo de quedarse embarazadas, como ocurre en la adolescencia. La psicoterapia durante el embarazo se puede realizar con medicamentos hormonales para regular el ciclo menstrual, pero también es necesario el acompañamiento de un psiquiatra o psicólogo para eliminar las causas. Esto llevó al desarrollo de este problema.

Síntomas principales

Los síntomas de un embarazo psicológico son similares a los de un embarazo normal, aunque en el útero de la mujer no aparece ningún bebé, los síntomas principales son:

Sin menstruación

Náuseas

Somnolencia

Antojos

Trastorno hormonal

Desarrollo abdominal y mamario.

Aumento de peso y apetito.

Sensación de que el feto se está moviendo.

Producción de leche materna.

 La causa de estos síntomas en los embarazos psicológicos no se comprende bien, pero es posible que los desencadenantes psicológicos conduzcan a una sobreproducción de ciertas hormonas del embarazo, lo que resulta en síntomas similares, como en un embarazo real.

¿Cómo se puede hacer el diagnóstico?

Un embarazo psiquiátrico es diagnosticado por un médico general u obstetra, que puede requerir:

Prueba de embarazo en la farmacia.

Medición de la fracción beta-hCG en la sangre;

Ultrasonido del abdomen o la vagina.

Las pruebas de embarazo, ya sea de orina o de sangre, arrojarán resultados negativos de que no hay embarazo en el útero de la mujer, lo que aumenta la producción de hormonas para indicar su presencia. De igual forma, la ecografía mostrará la ausencia de saco gestacional, así como posibles signos de embarazo, como latidos del corazón o la presencia de placenta.

Cambios psicológicos durante el embarazo

Principales cambios psicológicos:

En el primer trimestre del embarazo

La mujer debe “adaptarse” a la nueva situación. Esto provoca diferentes reacciones, pero las dos más comunes son: la emoción y el miedo. En la pasión, la madre sueña con su futuro bebé y se traga el miedo mientras pasa el primer trimestre y todo marcha bien; Miedo a perder un hijo… Las emociones a menudo hacen que las emociones se supriman hasta que se acaba el tiempo.

Este miedo a la pérdida potencial puede crear más o menos ansiedad. Una vez que estos miedos desaparecen, la futura madre comienza a disfrutar de su embarazo y entra en el segundo trimestre…

En el segundo trimestre

La madre teme que el niño haya crecido bien y esté libre de deformidades. Aunque desde un punto de vista psicológico, es la mejor clase. La madre se siente fuerte, enérgica y con ganas de hacer las cosas. Es cierto que, si te sientes bien físicamente, también lo estás psicológicamente. En general, durante este trimestre, la madre está cada vez más tranquila.

Embarazo y cambios psicológicos en el tercer trimestre del embarazo

Se producen muchos “cambios emocionales”. Por otro lado, el deseo de dar a luz a un hijo debido al aumento de las molestias físicas. Por otro lado, el miedo al parto y a criar a un hijo (¿sin saber qué hacer?). Psicológicamente, el embarazo son 9 meses de preparación para la madre. Es hora de adaptarse a las nuevas circunstancias, es hora de ser madre. Los cambios que se producen a nivel psicológico no son necesariamente negativos y naturalmente ayudan a alcanzar la madurez psicológica necesaria para la maternidad.

Primeros cambios físicos en el embarazo

El primer síntoma del embarazo de una mujer es la ausencia del período, cambios físicos que hay:

Cambios en el primer y segundo mes de embarazo

El agrandamiento e hinchazón de los senos, debido al aumento de los niveles de hormonas, es uno de los primeros signos de embarazo. Estos síntomas a veces son más severos que antes de la menstruación y mejoran después de las primeras semanas a medida que el cuerpo se adapta a los cambios.

Micción frecuente o micción, durante el embarazo aumenta la cantidad de sangre y otros fluidos en el cuerpo y, por lo tanto, los riñones manejan más líquido que llega a la vejiga.

Náuseas o vómitos, la mayoría de las mujeres no experimentan dolor abdominal ni vómitos hasta el primer mes de embarazo. Sin embargo, algunas mujeres experimentan náuseas desde el principio y otras no.

La fatiga es un síntoma común al principio del embarazo. La causa no se conoce con certeza, uno de los factores que contribuyen a la somnolencia es el rápido aumento de los niveles de progesterona.

Cambios de humor, puede experimentar fragilidad emocional y cambios de humor de vez en cuando durante este tiempo.

Flatulencia, los cambios hormonales pueden causar flatulencia similar al período premenstrual. Este bulto puede hacer que la ropa quede más ajustada.

Cambios a partir del tercer mes

Para aliviar las náuseas, si estos síntomas persisten después del tercer mes de embarazo, se deben preparar remedios estomacales y beber abundante agua durante el día.

Agotado y con problemas para dormir, a menudo te sientes cansado durante el día debido a los cambios que se están produciendo.

Para superar las dificultades de dormir bien por la noche, debe hacer lo siguiente:

Trate de dormir de lado con una almohada debajo de su estómago y otra almohada entre sus piernas. Antes de acostarse, tome un baño tibio para relajarse.

El ejercicio para mujeres embarazadas, como el yoga, puede ayudarlas a dormir bien.

La aparición de acné, para prevenirlo, procura lavarte la cara varias veces al día con un jabón suave. No se recomiendan productos como la isotretinoína y la tetraciclina, ya que no son seguros y pueden causar defectos de nacimiento durante el embarazo.

Cambios en los senos, aquellas que están por comenzar a amamantar, en este día notarán que han aumentado el tamaño de sus senos.

Estreñimiento. Estos síntomas son causados ​​por niveles elevados de hormonas que ralentizan el sistema digestivo.